Velocidad mínima en carretera ¿Cuál es y porqué es importante?

En MIGTRA, siempre estamos hablando de la velocidad máxima y sus riesgos asociados, pero ¿alguna vez te has preguntado sobre la velocidad mínima en carretera y por qué es igual de importante para la seguridad vial?. Aunque muchos conductores se centran en no exceder los límites máximos de velocidad, ir demasiado lento también conlleva riesgos significativos y en este blog te contaremos cuáles son.

En Chile, la velocidad mínima en carretera es de 70 km/h y en zonas urbanas, este límite baja a 50 km/h. Según el decreto de ley promulgado en 1986, la velocidad en autopistas debe situarse entre 100 y 70 km/h. Para camiones, vehículos articulados y furgones, la velocidad mínima en autopistas y autovías es de 60 km/h debido a su potencial peligrosidad, mientras que en carreteras convencionales puede ser tan baja como 35 km/h, sobre todo en zonas cercanas a colegios, hospitales, etc. Estas regulaciones son necesarias para evitar situaciones peligrosas donde un vehículo circulando a baja velocidad podría comprometer la seguridad de otros conductores.

Circular a una velocidad muy baja sin razón aparente, especialmente en vías rápidas como carreteras donde otros conductores pueden alcanzar hasta 120 km/h, no solo es peligroso, sino que también obstruye el flujo normal del tráfico. Sin embargo, hay excepciones: en condiciones meteorológicas adversas como lluvias intensas, nevadas o hielo se puede recomendar a los conductores a reducir la velocidad por debajo de 70 km/h. Además, los vehículos averiados pueden circular a velocidades reducidas, siempre que abandonen la vía lo antes posible y señalicen correctamente.

Además de eso, hay que tener en cuenta otro factor: a mayor velocidad, mayor debe ser la distancia de seguridad entre vehículos. Una regla básica es mantener una distancia que permita que transcurran al menos 3 segundos desde que el vehículo delantero pase por un punto hasta que lo hagas tú.

La fluidez del tráfico es esencial para evitar congestiones y minimizar el riesgo de accidentes. ¿Sabías que según estudios de la CONASET, si todos condujeran a la velocidad adecuada, se podría prevenir una cuarta parte de las muertes por siniestros de tránsito? 

La experiencia nos ha demostrado que reducir la velocidad de circulación no solo disminuye la frecuencia de siniestros, especialmente aquellos que involucran peatones, sino que también reduce la gravedad de estos incidentes. Sin embargo, no se trata solo de ir más lento. El objetivo es encontrar un equilibrio, y aquí es donde herramientas como el RAEV de MIGTRA son invaluables para monitorear la velocidad de flotas completas, ya sea en el transporte de carga, pasajeros, o mercancías peligrosas.

Para leer más sobre la otra cara de la moneda, es decir, sobre velocidades máximas y sus repercusiones, te invitamos a explorar nuestros blogs anteriores y visitar nuestro canal de YouTube, donde encontrarás más información sobre la seguridad vial y nuestras soluciones tecnológicas para mejorar el transporte.